– Se recomienda buscar refugio lejos de zonas de logística militar y hacer acopio de suministros básicos.
– El soldado ucraniano que se hizo estallar con un puente para detener el avance de los tanques rusos.
– La guerra de Rusia contra Ucrania, en directo.
El ataque de Rusia a Ucrania ha provocado que la población civil de ciudades como Kiev huya de sus hogares o se refugien donde puedan. Muchos se han escondido en las estaciones de metro, mientras otros llevan horas en sus vehículos intentando avanzar hacia la frontera con Polonia en una autopista completamente congestionada.
El director de la Escuela Española de Supervivencia, Ignacio Ortega, defiende que lo primero en una situación bélica es «estar informado, porque eso te hace tomar las decisiones correctas». Este experto señala como consejos fundamentales establecer un protocolo, preparar un sistema de alimentación y buscar algún lugar seguro que sirva de refugio. «Si algo puede salir mal, es cuestión de tiempo que pase», piensa Ortega.
Información y protocolos: ¿Dónde me refugio?
Lo más importante es estar prevenido y plantear todos los casos hipotéticos que se pueden vivir durante una guerra, para preparar con antelación las soluciones. Ortega defiende que es primordial estar pendiente de los avisos de la prensa, seguir las recomendaciones e indicaciones de los cuerpos de seguridad del Estado y establecer un protocolo de actuación en caso de que los componentes del núcleo familiar no estén presentes en el momento del evento de supervivencia y que las comunicaciones hayan caído.
Es recomendable saber dónde poder refugiarte si te vas de la ciudad (la casa de un conocido, en el campo o si se tienen contactos en otro país). Se deben evitar horas puntas, porque, como está sucediendo en Kiev, las carreteras tienden a colapsarse.
Ortega considera que es mejor tener una radio que una televisión, porque esta última «puede caer en las manos de fuerzas invasoras», y además las redes de conexión radiofónica están muy extendidas geográficamente.
Orientarse: haz acopio de mapas físicos
Lo más probable es que, en un conflicto bélico como el que está sufriendo Ucrania, no se pueda establecer la conexión a disposivos tecnológicos, y tampoco a Internet.
Este especialista aclara que se deben tener mapas físicos de la ciudad y del país, porque a partir de las primeras horas probablemente no se pueda acceder a herramientas comoo Google Maps o similares. Esto va a ayudar a poder ubicarse con facilidad, a establecer posibles rutas de evacuación y a tener previstos trayectos alternativos.
Es bueno también disponer de sistemas de comunicaciones que no sean el teléfono móvil ni nada informático, como por ejemplo los walkie talkies.
Suministros básicos: pilas, efectivo, botiquín y medicamentos para enfermedades crónicas
Pilas, una radio, alimentos, sistemas de iluminación,… Se ha de realizar una lista con las necesidades que se van a tener, teniendo en cuenta que si se abandona la casa es posible no volver en horas, días o incluso nunca, que los supermercados pueden ser arrasados en cualquier momento o que el Gobierno puede imponer un toque de queda.
En esta línea, hay que tener combustibles para los vehículos (es fácil que se acabe o que haya largas colas, como está pasando en Ucrania), dinero en efectivo (monedas y billetes de cantidades no muy grandes; evitar las tarjetas de crédito), sistemas de iluminación artificial, tener recursos alimenticios y un botiquín para posibles cortes, infecciones o dolores estomacales o de cabeza.
Asimismo, es de vital importancia tener medicamentos para quienes sufran enfermedades crónicas, como diabetes o problemas de corazón, porque las farmacias tienden a cerrar o a no tener cantidades suficientes, y los servicios sanitarios, en caso de seguir activos, estarán bloqueados por su aumento de demanda.
Alimentación: acopio de agua, conservas, leche condensada o chocolate
El agua es difícil de conseguir en núcleos urbanos si se vacían los supermercados y se corta el agua potable por los bombardeos, con lo que Ortega recomienda la acopia de grandes cantidades, calculando «tres o cuatro litros por persona al día». Se pueden rellenar cubos, bañera, bolsas, etc.
Se deben preveer alimentos en conserva, como legumbres cocidas (que requieren menos tiempo de cocina), azúcar, sal, frutas en almíbar, miel, chocolate, galletas, conservas de pescado y carne enlatadas, leche condensada o en polvo, frutas que se conserven más tiempo de manera natural, patatas para cocinar cocidas, huevos y alimentación específica para diabéticos o celiacos.
«Si no hay fluido eléctrico, todo lo que tengamos en el congelador se estropeará más rápido», explica Ortega. Habría que empezar consumiendo esos alimentos y si tenemos muchos, aprender técnicas de conservación para el resto (deshidratado, salado, adobo, conservas en aceite, etc.).
Márchate si estás cerca de un aeropuerto, cuartel o zona militar
Huir de casa es extraordinariamente frecuente en tiempos de guerra, con lo que desde el primer momento se deben establecer lugares seguros que sirvan de refugio. Los búnkeres no son algo común, pero las estaciones subterráneas de metro pueden servir como alternativa.
Ortega especifica que si la vivienda está «cerca de una instalación militar, es muy probable que nos afecten los ataques con bombas». Por lo tanto, lo mejor es cambiar de residencia si se vive cerca de algo que se pueda considerar como zona de logística militar, véase aeropuertos o cuarteles.
Priorizar irse al campo
Si se tiene una casa en el campo (propia o de algún conocido) lo mejor es refugiarse allí, porque es poco probable que sufran ataques. «Un avión no pierde el tiempo bombardeando esas zonas», afirma Ortega. Además, hay mayor autosuficiencia.
Este experto anima también a colaborar con los vecinos y aislar la casa en caso de frío, «cerrando rendijas, poniendo aislantes como cartones o plásticos de burbujas en las ventanas». También se recomienda disponer de mantas, ropa de invierno y repuestos de gas para calefacción, y «reunir a la familia en una sola habitación para subir el calor y optimizar la fuente de energía que la está proporcionado».
Proteger las ventanas con cinta adhesiva
Habría que cubrir las ventanas de la casa con cinta adhesiva o cello, porque si estas estallan durante un bombardeo, los cristales salen disparados y es muy peligroso.
Las ciudades serán uno de los principales focos de bombardeos, con lo que es bueno no mantener las luces de las viviendas encendidas para evitar ser blanco del ataque. Es recomendable cubrir las ventanas con cartones o tablones de madera.
Evitar desplazamientos innecesarios: las carreteras estarán colapsadas
«No se debe salir de casa salvo que sea estrictamente necesario», y en caso de hacerlo hay que tener en cuenta que el caos es total, porque, por ejemplo, «los semáforos y sistemas de ordenación del tráfico no estarán operativos» por los cortes de luz, y además habrá muchísima circulación en la carretera de familias que busquen huir o moverse por la ciudad. Por otro lado, conducir se convertiría «en una situación de riesgo».
Cómo utilizar el baño: las heces en un cubo y no mezclar con orín
Si se cae el sistema de agua, también pasará con el de agua sanitaria. Para poder seguir utilizando el inodoro, «las deposiciones sólidas se pueden hacer sobre un cubo con una bolsa de basura grande, y no se deben mezclar con el orín para no producir fermentación». Una vez está rellena la bolsa se cierra herméticamente, «y si se dispone de tierra o serrín, se le echa un puñado tras cada uso para evitar el mal olor».