Actúen como si hubieran estado aquí antes”. Aún recuerdo esta mordaz crítica del comandante de mi escuadrón cuando un grupo de capitanes estaban a punto de ser soltados en su primer servicio temporero en la base aérea Nellis.
Creo que esta simple mantra se aplica a todo el espectro del desarrollo de aviadores: averigüe qué es “lo correcto” de los que están más adelante en su travesía, modele ese comportamiento e incorpore esas destrezas y perspectivas en su bolsa de herramientas mucho antes de que las necesite.
Si está leyendo esto, es probable que tenga aspiraciones de llegar a coronel. Me fijo en lo que ha sido mi carrera profesional y recuerdo a viejos y malhumorados coroneles hablar de las “reglas no escritas”. Añadía un factor místico e intimidatorio que dificultó mi confianza en mi desarrollo inicial como líder superior. El artículo “Bueno o excelente: coronel, depende de usted” (Air and Space Power Journal, primavera de 2011) del General de División Kane, USAF, es un buen comienzo para desarrollar una imagen visual de líder superior estratégico, pero no trata de las expectativas diarias que tenemos de las filas de los rangos de nuestros líderes superiores. Así pues, a riesgo de cometer una herejía divulgando las reglas secretas, he redactado mi punto de vista sobre las cosas que me gustaría haber sabido como oficial más joven considerando la posibilidad remota de llegar a coronel. Para ello no se requiere gran inteligencia y muchas de esas reglas parecerán evidentes. No obstante, espero que estas reglas le den un poco más de confianza y perspectiva, haciendo que su carrera profesional sea más efectiva.
Entienda que todos improvisan sobre la marcha
No hay que negar la enorme diferencia entre un teniente coronel y un coronel, reconózcalo y acéptelo. Durante toda su carrera, los coroneles han sido criaturas míticas endiosadas que ejercen un poder profesional de vida o muerte sobre usted. El gran secreto es que ninguno de nosotros sabía realmente lo que estaba haciendo hasta que nos pusieron las insignias de águila. No deje que esto lo intimide; si le dieron esta oportunidad es porque ha sido respaldado durante años por coroneles y generales que ya habían recorrido ese camino y evidentemente vieron en usted el carácter y las destrezas que le permitirían tener éxito. No obstante, esperamos que los coroneles pasen a este nuevo nivel con cierta humildad. Aún no lo saben todo (incluso después de leer estas reglas secretas).
Esperamos que acepte esta responsabilidad y se esfuerce más que nunca en desarrollar sus relaciones, destrezas y efectividad. Estudie liderazgo, buscando activamente mentores, e interróguese usted mismo de forma constante y brutal mediante su propia introspección y los comentarios de otros. Sobre todo, asuma su función de líder superior como usted mismo. Nadie espera un cambio considerable de personalidad (a menos que usted sea un tarado total, si es así espero que le hayan erradicado hace años) y sus colegas y aviadores notarán una acción forzada a gran distancia. Ahora tiene la oportunidad de ser el coronel que siempre quiso seguir, y evitar ser el que temía y despreciaba.
Sea una persona irreprochable De todos los aviadores se espera “ante todo—integridad”, pero el rango y la posición de superiores conllevan nuevos niveles de escrutinio. Como dicen, cuanto más alto subas, más personas podrán verle el trasero. Aquí se indican unas cuantas ideas sobre como su ética e integridad personal pueden hacer que su efectividad tenga éxito o no: conduzca su propio automóvil, gaste su propio dinero, acuéstese con su cónyuge. Parece bastante sencillo, pero la mayoría de las investigaciones sustanciadas de líderes superiores se refieren a esas tres categorías. Sepa que hay más personas que le observan y cosas de las que “podría haberse salido con la suya” anteriormente, llamarán más la atención.
Sea transparente
Usted no puede contar todo a todo el mundo, pero sea lo más sincero posible acerca de cómo toma decisiones, administra disciplina, desarrolla la fuerza y se comunica con sus aviadores. Cuantas más sean las personas que sepan cómo piensa y vean que sinceramente quiere lo mejor para la organización, más le darán el beneficio de la duda.
Sea accesible
Si sus aviadores saben que pueden acudir a usted con un problema sin ser disparados, es más probable que le den la oportunidad de resolverlo antes de ir directo al inspector general.
Dese cuenta que esto no trata de usted
Mi primer comandante de escuadra aérea operacional, el primer coronel que pude observar de cerca, esperaba que el personal de operaciones le tuviera una Diet Coke y Horn una barra Snickers (del refrigerador) esperándole en su escritorio al volver de un vuelo.
Casi 30 años después, sigo recordando la impresión que dejó en el joven Teniente Horn: llegó a la punta de la pirámide y todos estábamos allí para servirle. Afortunadamente, esa pirámide se ha invertido con el paso del tiempo y nuestra Fuerza Aérea está llena de muchos líderes superiores que se dan cuenta de que existimos para servir y apoyar a nuestros aviadores. Esperamos que esta sea la razón principal por la que desea ser un coronel en primer lugar: la oportunidad de tener más influencia, no para autopromocionarse de forma descarada, sino para eliminar obstáculos del camino de sus aviadores. Mi consejo es el siguiente: tómese el trabajo con seriedad, pero no se tome en serio usted mismo; no crea en sus propios comunicados de prensa; y no sea nunca el líder que dijo que no sería.
Hay algunas señas externas sencillas que realmente demuestran que tiene vocación de ejercer un liderazgo de servicio:
- Su humildad y respeto modelo: realmente muestre a sus aviadores que valora el don de liderarlos, y hable con el conserje, el portero de guardia o el encargado del mantenimiento con el mismo respeto que con el jefe de su jefe. La humildad y el respeto son señas de gran confianza y fortaleza. También aplique una introspección regular y una autorreflexión honrada para evitar creer en sus propios comunicados de prensa. Tiene una gran oportunidad de mostrar a sus empleados la confianza y el respeto llevando las decisiones al nivel más bajo posible (e incluso dejar que fracasen), incluyendo hacer que sus subordinados tomen decisiones incómodas en vez de mandarlas a su nivel. Por último, muestre fortaleza y humildad rodeándose intencionadamente de un equipo diverso donde no todos piensan como usted; anímelos a cuestionar sus ideas y encontrará soluciones, incluso mejores.
- Lleve su propio equipaje: esté dispuesto a arremangarse y participar para sacar la basura (o literalmente llevar su propio equipaje). No obstante, habrá momentos en que sus aviadores insistirán en hacer el trabajo sucio para mostrar liderazgo de servicio. Déjelos que lo hagan y busque otra forma de participar.
- Respete el tiempo y la pasión de sus aviadores: sea puntual, siempre. A menos que no pueda escaparse de alguien de rango superior, discúlpese de forma sincera y haga avanzar las cosas incluso más rápido. Elimine cualquier reunión que pueda llevarse a cabo por otros medios y reduzca las reuniones necesarias al mínimo concentrándose solamente en asuntos transversales. Recuerde también que cada uno de sus aviadores tomaron la decisión de servir y tenían, al menos, algo que decir en su ocupación profesional. Sigo sin entender por qué a algunas personas les gustan ciertas ocupaciones, pero realmente les admiro su pasión y aprecio genuinamente el impacto que ejercen en la organización.
- Debe pelear a muerte por sus aviadores: demasiados líderes son presos de la tendencia de ir sobre seguro cuando el próximo trabajo podría estar en riesgo.
Corra cierto riesgo profesional y trate cada trabajo como si fuera su último, al defender a sus aviadores y los recursos que necesitan para lograr la misión.