Ante el reto que se nos ha presentado a todos para afrontar la crisis del COVID-19, la seguridad privada desempeña un papel clave. Y es que, aunque a veces pase desapercibida, la seguridad privada forma parte del sistema de seguridad público.
Presente en todas las parcelas de actividad, nuestro sector toma ahora, si cabe, mayor relevancia en hospitales, organismos del estado o infraestructuras críticas, entre otros. En todos y cada uno de ellos, está presente algún trabajador del gran equipo humano de más de 80 000 profesionales que conforman la seguridad privada de nuestro país.
En este sentido y en colaboración con el sistema de seguridad nacional, se están preservando los servicios esenciales como las TIC, la sanidad, el transporte, la energía o el agua, ya que deben de estar garantizados para que los ciudadanos puedan acceder a unos servicios mínimos en su confinamiento. Por todo ello, uno de los focos en los que la participación de la seguridad privada es fundamental, son las infraestructuras críticas que, tras el real decreto aprobado por el gobierno, han quedado bajo supervisión y vigilancia del Ministerio del Interior.
Por otra parte y como hemos mencionado, ahora más que nunca, se hace necesaria una colaboración estrecha entre los operadores de seguridad privada y las Fuerzas de Seguridad del Estado. Pero además, al encontrarnos en esta comprometida situación, la seguridad privada cuenta ya con un canal para pedir apoyo operativo del Ejército.
En materia de ciberseguridad, desde el CCN-CERT, del Centro Criptológico Nacional, adscrito al Centro Nacional de Inteligencia (CNI), se ha emitido un documento con recomendaciones dirigidas a salvaguardar el ciberespacio español, en especial, el referido a sectores estratégicos, con prioridad absoluta en el de la salud.
Precisamente en estos días, y tal y como han asegurado responsables policiales, hemos conocido la difusión de un nuevo virus informático que busca anular todo el sistema informático de las entidades sanitarias. Una intrusión que nuestro sistema no se puede permitir, y contra el que los expertos de seguridad deben de trabajar con inmediatez.
Asimismo, y dado el brutal incremento que está experimentando el teletrabajo, este documento contribuye a facilitar a empresas y usuarios la configuración de sus sistemas y redes con el objetivo de que sigan protegidos.
Otro capítulo es el referido al tratamiento de datos relacionados con la salud de la población en una crisis como la del Covid-19. Para afrontar este nuevo desafío, la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD), ha establecido las reglas necesarias para que el tratamiento de datos personales no sea obstáculo en la toma de medidas que adopten las autoridades sanitarias.
Estos son tan sólo, algunos de los aspectos en los que está trabajando nuestro sector, pero los ámbitos de actuación son muchos y muy diversos. Todos debemos de aportar nuestro granito de arena para acabar con la pandemia, pero desde aquí queremos expresar nuestro especial agradecimiento a todos los profesionales de nuestro sector, que con su esfuerzo y sacrificio diario contribuyen a proteger nuestras necesidades más primordiales.
Seguridad, sector clave ante el COVID-19
newsletter.eulen.com
Fuentenewsletter.eulen.com
Fecha de publicaciónmarzo 2020
BELT.ES no se hace responsable de las opiniones de los artículos reproducidos en nuestra Revista de Prensa, ni hace necesariamente suyas las opiniones y criterios expresados. La difusión de la información reproducida se realiza sin fines comerciales.